y acá estamos nuevamente... pasó el parcial (¿o yo pasé por el? ¿o el me pasó por encima?...lo sabremos el sábado próximo) ... llegué pálida, angustiada, con cara de nosenadaquestopaserapido. Como mi cara es transparente no faltó el comedido que me prestó un buen resumen para que pasen los nervios, la que te quiere animar y te dice "seguro que te va bien, vos estudiaste, no?"... claro que estudié...pero siempre me pasa igual, llega el momento y me parece que fue poco, que faltó un día más, que para que me metí en esto, que quien me manda y bla, bla, bla.
pero pasó...
esta vez tuvo un ingrediente más (como si fuera poco). En esta oportunidad había algo en el contenido que me movilizaba, me revelaba y me entristecía (mamita querida ¿ahora se entiende por qué quedé de cama? a ver, encima de los nervios este buen hombre me toca los sentimientos...) veamos: el bueno de Rogers, quien me enamoró, lo confieso, habla de esto de ser auténtico, ser uno mismo. No solo esto, da un paso más y dice que si vos como consultor nos sos "vos mismo" y te mostrás no tenés posibilidad de ayudar... cuando hace unos meses lo leía yo pensaba "tal cual, es así, al fin alguien escribe lo que vengo sintiendo"...muy contenta ella con su Rogers querido... claro, el contenido empieza a decantar, y te animás de a poco a mostarte, no sólo un poquito... y te pasa que el otro se corre, se va ¿cómo hacés para repetir alegremente lo aprendido si es como tirarle sal a la herida?...
¿cómo hacés? haciendo "lávese la cara m´hijita, aprete los dientes y sea fiel a eso que vio un día...que hoy está nublado, pero ya sabe, las nubes también pasan".