La nena no me come

Si me vieran las chicas de "crianza con apego" me sacan a la niña por hdp.
 Desde del viernes empezó una contienda sin cuartel por que Eva se niega con bastante vehemencia, a agarrar la mamadera. Venía tomando, pero el viernes no se bien por que, se declaró en rebeldía y me explicó con sus chillidos que la cosa es así: o teta o nada. Y en un esfuerzo, tal vez y si la agarro con mucho hambre, una papilla insulsa, pero mamadera NO.
El tema es que la cantidad que puedo producir de leche ya no es suficiente  y se queda con hambre, por lo cual debería vivir prendida y por otra parte el hecho de que no coma otra cosa hace que separarnos por más de 4 horas sea una tortura para la niña. Esto último es lo que más me inquieta.
Hoy en día el consejo general es que el niño se destete solo, que la lactancia se prolongue hasta los 2 años... la vieja guardia, opina que a los 4 meses se debe empezar a incorporar alimentos, a los seis o siete suspender la teta y a otra cosa mariposa...¿ y qué digo yo? ¿qué me pasa a mi con esto? ¿cómo me las arreglo con una conducta en Eva que no me venía venir? Ok, ecompletamente diferente a Cata ¿cómo celebro esta diferencia yo que tanto incapié hago en no masificarnos ni pretender que seamos todos iguales?
Que se yo... la verdad lo que me preocupa no es la nutrición, me precupa la dependencia, me preocupa no estar dándole el mensaje correcto. Cada mamadera desde el viernes fue una lucha, lágrimas, gritos, la cratita llena de leche y la boquita apretada.
¿Hay mensaje correcto? ¿Hay UNA forma de hacer las cosas?
Lo que si queda demostrado es que la maternidad te da más preguntas que respuestas y que Eva, desde siempre me trajo un aprendizaje, y es que la naturaleza tiene tiempos misteriosos, que exigen ser respetados.  Desde la panza  me hizo quedarme quieta, el parto fue sólo cuando todo estaba dispuesto y se dio así, naturalmente sin sala de parto... recodábamos con Andre el otro día la llegada de Cata, con Bowie de fondo siendo atajada, literalmente por la doctora, una explosión de vida como todo en ella, Eva se fue deslizando sin avisar a nadie más que a mi, asomándose pachorra, a su ritmo natural. Se me ocurre que uno es como nace, se me ocurre (en una razonamiento más poético que científico) que nuestros primeros instante extrauterinos marcan (o cuentan, mejor dicho) como somos y cual es nuestra impronta.
A lo mejor tengo todas las respuestas en mis brazos, a lo mejor lo que me resta es seguirla escuchando y aprendiendo.
pd: en su honor un tema de tonolec http://www.youtube.com/watch?v=xmC4EfbgVuw&feature=related
nota: me está costando escribir, no sé bien. la cosa no viene fluyendo como quisiera, pero como me hace bien, como me resulta un organizador clave, voy a empezar a hacerlo cual ejercicio o tarea "para el hogar" y sin repara demasiado en si el tema es pertinente o no. Voy a mandarme a escribir como al principio, de una, sin filtro de la cotideaneidad.

A confesión de parte...

Eva:-buuuaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!

Cata: -"maaaaaa!!! Eva se golpió con mi manito"

Eva: buuuaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!

Cata:-"maaaaaaa!!! me golpié con Eva"

Esta foto salió de casualidad... le venía sacando una serie de fotos a Andre con Eva y se coló esta toma.

Igual tengo que decir que estos arranques son proporcionales en intensidad a los ataques de amor <3

...por la blanda arena que lame el mar...

 Definitivamente no es octubre y sin duda no tengo la melancolía de Alfonsina como para querer ser "el olvido perenne del mar", pero cada vez que la tarde está así de linda me recito estos versos...

Quisiera esta tarde divina de octubre
pasear por la orilla lejana del mar;
que la arena de oro, y las aguas verdes,
y los cielos puros me vieran pasar.

Ser alta, soberbia, perfecta, quisiera,
como una romana, para concordar
con las grandes olas, y las rocas muertas
y las anchas playas que ciñen el mar.

Con el paso lento, y los ojos fríos
y la boca muda, dejarme llevar;
ver cómo se rompen las olas azules
contra los granitos y no parpadear;

ver cómo las aves rapaces se comen
los peces pequeños y no despertar;
pensar que pudieran las frágiles barcas
hundirse en las aguas y no suspirar;

ver que se adelanta, la garganta al aire,
el hombre más bello, no desear amar...

Perder la mirada, distraídamente,
perderla y que nunca la vuelva a encontrar:
y, figura erguida, entre cielo y playa,
sentirme el olvido perenne del mar.http://www.youtube.com/watch?v=4CAesBCjk20