en clave de Cata

De nuevo estoy de vuelta... la ausencia se debió a razones ajenas a la dirección del blog (je)
Hoy me siento contenta y "aireosa", les cuento: tenía que ir a rendir un parcial, preparado debidamente y con una espera de nervios como me pasa siempre... anoche Cata empezó a tener fiebre...
La maternidad, la mía por lo menos, tiene esto de que una decisión chiquita, como dar o no un parcial, se vuelve trascendente...
Y me quedé. Como dije en otra oportunidad, puse el swich en modo mamá y el parcial quedará para la instancia de recuperatorio pero tengo una paz... me pasa cuando tomo la opción correcta.
¿vieron cuando se afina una guitarra? ¿vieron cuando se encuentra que la nota vibra justo en el tono que tiene que sonar? esa sensación de armonía "intrínseca" es la que me acompaña hoy... y esta mañana, después de bañarla para normalizar su temperatura, dejé que me tome con su manita y "me siente" en su sillita, tomamos unos mates y me mira y dice "que aitos los mates con a mamá" (aitos es ricos) lo sentí como una fiesta, como si me hubiera dicho "gracias mamá por elegirme hoy que me siento pachucha".
Saben?... releía el blog y veo cuanto y cuanto hablo de la maternidad, de cómo se repiten estos episodios donde la clave está en la elección. Espero no aburrirlos, la verdad es que hay vivencias que me atraviesan y me centran y por eso las comparto. Y no es que "ser mamá" ocupe todo, sino que lo empapa y lo relativiza. Ayer estaba contariada porque sentía que "no sabía nada" para el examen... hoy una frase de Cata pone las cosas en su lugar y parafraseando a una amiga "diste examen de mamá, y te sacaste muy bien 10 felicitado".

¿dónde está el deseo?¡acá tá!

Y llegó la "Ohlala!" y me dí cuenta de que no había terminado de ojear la anterior. el primer mecanismo fue de autoinculparme(existe la palabra?) "ves, gastás en cosas que no usás". Me puse a teminar de leer, mirar la vieja antes de abrir la nueva. Me di cuenta de algo. ME ENCANTA leer revistas, me encanta. Como me gusta escribir también me gusta espiar como escriben otros. Me gusta pensar que quisieron mostra los publicistas. Me gusta soñar con ropa y maquillajes lindos ¿y saben qué? darme ese "gustito" me hace bárbaro. Me hace bien de verdad (bueno che, a cada uno le gusta lo que quiere je). ¿saben cuanto se tarda en leer la nota de una revista de esta calaña? 13 minutos (lo cronometré). Tengo una agenda apretada. No lloro porque todo es elegido, pero vivo al palo, trabajo, hogar, niña, marido, estudio...aún así ¿no me puedo tomar 13 minutos diarios para hacer lisa y llanamente lo que me gusta? pareciera que sí ¿no?

¿Les conté de mis divinos pantalones? Bueno, son divinos y son “de salir”. La cosa que ayer cuando me los probaba me decía “hace mil que no salgo (pobre yo?) quiero que me invite a salir!” . Pero ¿a qué esperar que el otro adivine tus deseos? Lo invito yo. “¿qué tal si dejamos a la gorda en lo de tu vieja y salimos” por suerte hubo quórum. Y salimos. Y nos charlamos la vida, y nos pusimos lindos y fuimos novios y amigos un rato... ¿no nos podemos tomar una noche al mes? pareciera que si ¿no?

Mientras me bañaba esta mañana repasaba todas estas cosas, y le agregaba una charla que tuve el jueves con una amiga que me decía "y a vos ¿qué te gustaría?" y pensaba en esto de conectarse con el propio deseo. A veces nos parece que si lo resignamos somo mas altruistas (?) o abnegadas o nos acercamos más a nuestros objetivos... ¿y para qué, si en el camino nos perdimos? y ahora pensaba, también, que esto de conectarse con las ganas propias y asumirlas también tIene que ver con hacerse cargo de quien uno es y, sin mas vueltas, ser uno mismo. así que hoy, con maguyones de errarrle a los caminos les digo, yo soy taio, mamá, esposa, amiga, mujer, hija, hermana, maestra, estiudiante y una máquina de tener ganas... y agrego, agitando la cabeza "yo SOY lo que SOY".

Al maestro con cariño

Resulta (aviso a los incautos) que el sábado es el día del maestro y en el cole por diversas razones lo festejan mañana. Armando mi miércoles con acto me acordé que una vez en un arranque de no se que un amigo me saluda para mi cumpleaños y yo le espeté "más vale saludame para el día del maestro, porque tiene más que ver conmigo" (pobre pibe, estaría carajeada por algo y necesitaba descarga). Entre sonrisas cómplices conmigo misma me acordaba de esto y reflexionaba en la vocación docente. En mi vocación.
¡Justo ahora! justo cuando estoy en medio de nuevas bùsquedas.
Una vez leí un cuento que hablaba de que el tema vocacional tiene que ver con lo que uno deseaba y soñaba de chico y que el encontar el camino tiene el sabor de la promesa cumplida.
Yo quise ser de todo: monja, policìa, enfermera, mecanica (?), mamá, periodista, locutora, arquitecta, psicòloga, filosofa, empresaria...maestra? no, maestra no.
A los 18 estaba viviendo en un pueblo y las posibilidades de estudiar filosofìa eran nulas...y lo ùnico que podìa hacer era magisterio. Y allá fuì. Y me fue bien y cuando tuve las primeras pràcticas hasta yo me sorprendì de lo còmoda que me sentìa en el aula, con los nenes, imaginando como explicar tal o cual tema. La que habìa sido una pèsima alumna toda la vida, ahora era abanderada.
Creo que el aula me encontró a mi y en salón soy de todo lo que quería ser cuando era chica: trabajo para los demás como cuando soñaba ser monja, soy paladìn de la justicia y soy un policía (y en el patio ni te cuento, je) soy enfermera de nanas, soy mamá queriendo mucho y poniendo límites, soy medio periodista traduciendo la "realidad" a los chicos, seco làgrimas y trato de entender cabecitas como una psicóloga, hago filosofía con los chicos... la verdad es que el aula me lo dio todo, mas que esperar que me digan "feliz día" soy yo la que tendría que decir GRACIAS. Por que la verdad es que hoy soy quien soy en gran medida por todos los años recorridos en la escuela.
Y es cierto que estoy en medio de nuevas búsquedas y encontrando un nuevo rol para mi; es cierto que muchas veces ya no me reconozco vibrando justo en mi nota en el aula. Es verdad que a veces siento que tengo que empezar a otear otros horizontes pero que nunca me olvide de dónde empecé, que nunca deje de decir gracias al salón, que siempre sea un poco maestra. Que siempre sea fiel a este tramo del camino.

"No engaña la flor que se marchita al hombre que gozó con su vista;
la vida me enseñó con el tiempo que el silencio promete semillas.
Despedirse es ser fiel al camino que nos hizo encontrar al amigo;
el tiempo me ha enseñado en mi vida que aferrarme, es negar que yo vivo.

Si todo camina en nuestra vida, busca encuentros todo el que camina;
enseña la vida con el tiempo que lo dado a la tierra, germina. "
(un pedacito de un poema de Mamerto Menapace)

nunca es triste la verdad...pero a veces duele

Más de una vez mi mamá me dijo: "a veces nos duele más a nosotros retarlos que a ustedes"... y yo escuchaba sin entender demasiado, mirando solamente mi frustración por no tener aquello, aquel capricho mejor dicho, que me era negado.
La maternidad te enfrenta muchas veces a tus propios límites y quisiera en esas veces que sea otro el que tiene marcar el no.
Hoy mi princesa, la dulce que canta, la que tiene la sonrisa que todo lo ilumina, la que con un abrazo todo lo sana, la que me enseña y me da fuerzas, esa preciosa criatura, tuvo uno de los berrinches mas fuleros que me tocó sobrellevarle. Y ahí estaba yo, practicamente arrastrando a una enana de 2 años que pataleaba para "salirse con la suya" ¿vieron ese típico nene que te cruzàs por la calle y pensás "si yo fuera la madre..."? bueno, una escena así, y la madre era yo.
¡cómo me hubiera gustado alzarla darle un beso y decirle "no pasa nada mi vida, no llores más" pero con todo el dolor del alma tenìa que mantenerme firme y mostrarle que los límites los ponemos los grandes, que no puede hacer simplemente lo que le venga en gana. El ùnico aliento que me daba a mi misma era saber que su habitual serenidad viene a que sabe que el mundo está ordenado, que no recae sobre ella la responsabilidad de su crianza y que hay una mamá (y un papá) que la sostienen.
Pasó la "batalla", durmiò su siesta como un ángel y al despertar era la misma de simpre. Yo quedé agotada, con màs preguntas que respuestas pero sabiendo que di lo mejor, que a veces ser plataforma para el crecimiento del otro es doloroso y que mamá tenía razòn.

keep on dreaming

Tengo un sueño. Así, simple, un sueño. Se me hace cursi la expresión, porque suena a invitación de cumpleaños de 15, pero no… (es que las invitaciones de 15 nos robaron expresiones que son profundas en sí mismas y de tanto manosearlas las vaciaron). Pero bueno, la cosa es que sí lo tengo, está ahí, gestándose de apoco, tomando forma, desvaneciéndose de a ratos, haciéndose fuerte de a otros ratos.
Es increíble la fuerza que me da.
Està ahì y realiza algo raro: me ata al presente. En lugar de proyectarme en una quimera me enlaza más con el día a día. Se me hace que tiene que ver con que este sueño tiene fuerte raìz en mì misma. No se me ocurre otra explicaciòn...
A lo mejor son esos los proyectos que prosperan, a lo mejor la cosa está en buscar dentro de uno esas ilusiones, esas "ideas locas" que te disparan la cabeza y te muestran lo que más tiene que ver con vos mismo.
Lástima que a veces cuesta, lástima que a veces lo veo tan lejano que al ver todo lo que falta recorrer me desaliento... por ahì es como el embarazo y parto: largo, con final cuesta arriba pero con una recompensa que resulta el ciento por uno.

modo mamá: on

He tenido mejores días. Mil asuntos pasan por mi cabeza y como no hago terapia les frito los sesos a ustedes (je). No, mentira, es que la verdad escribir me ordena, y creo que la mitad del cansancio se haría mas llevadero si las cosas se organizaran (al menos en mi cabeza). Es como mi desfrgmentaciòn del disco.
La gorda bajó del 39,4 de ayer pero el broncoespamo en vez de aminorar empeora, parece Dark Bader. Fui a trabajar, un rato y he ahí el primero de los temas.
En la cotidineidad no me cuesta dejar la gorda, siempre digo que mi cabeza tiene un swich, voy a laburar y apago la mamá, voy a estudiar y hago otro tanto y si salgo me pasa igual. No soy de quedarme colgada con "cómo estará la gorda". Me sale natural. Siempre me pareció que para ser buena mamá tenía que seguir siendo yo, y esto incluye seguir con las pasiones y compromiso de siempre. Es más, ahì radica la paz, en estar al 100 en la tarea o lugar que te convoque.
Pero cuando está enferma... ahí me lleno de preguntas y el swich queda fijo en el modo mamá... ¿haré bien? ¿estará contenta? ¿dónde está "mi lugar" cuando mi hija está enferma?
Me gustaría tener respuestas acabadas y unívocas. Me gustaría seguir siendo yo aún en las adversidades... y no me sale, y eso que mis adversidaes a veces se reducen a un broncoespasmo controlado, a unas gotas de corteroid y paf..
La gordita ya està acostada y debidamente medicada y hace una hora que no tose.. me voy a hacer la ilusiòn con que es una noche normal (por lo menos un rato...la verdad es que duermo con un ojo abierto)
A veces, aún en medio de tormentas lo mejor es una medida de JW y a dormir ...mañana será otro día para seguir buscando respuestas tratando de ocupar los lugares que me llamen.