martes, 8 de junio de 2010

La beta

Suena el despertador, no dormí bien. Arranca una rutina peliaguda que consiste en levantar a mi gorda y a mi marido. La beba llora, no piensa hacérmela fácil. Ramiro está cansadísimo así que le cuesta el doble amanecer ergo son dos los que pucherean mientras entro y salgo de los dormitorios...
Llego corriendo al colegio. Tarde. Una vez más...no hay cosa que me moleste más que la impuntualidad (eso y que me den un mate feo) en fin... llego, "buenos días"... nadie me escuchó, claro ya estoy afónica de nuevo.
Las criaturitas están indomables, yo bastante malhumorada y esta voz que no me sale...empiezo a desplegar mapas y que acá está Sudáfrica, acá Europa, que pin, que pan..."¿y eso es Argentina?"; "no, Fulanito, eso es América" (pedazo de animalito del zoo, ya estás en 5to...lo pieso. No lo digo)
Una de mis coequiper (la primera vez que escribo esta palabra)renunció, la otra está con licencia...me siento un poco sola... empiezo a preguntarme si yo también no me estaré pudriendo un poco.
En eso entra la directora para traerme unas notas, se está yendo mira mi semblante de estoycansadaydemalhumor y me dice "No te sientas sola Vicky, vas bien, no aflojes"... era eso lo que necesitaba, encontró la beta. Disimulo un poco (no vaya a ser cosa que se den cuenta de que soy humana y vulnerable...ps)
Eso necesitaba, una palmada en la espalda.

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