martes, 14 de diciembre de 2010

Agarrate Catalina

Me subí a la camioneta sin saber lo que me iba a encontrar. El mensaje de texto había sido muy escueto "me parece que se comió una pastilla de mi viejo". Yo tenía la esperanza que se refiriera a una pastilla de menta... La seriedad de Andrés y la gorda hecha un bollito me sacaraon la esperanza de cuajo. -"¿qué pasó Cata?" -"me comí e remeio de abuelo". Se acurrucó en mi pecho y se quedó callada y demasiado quieta todo el camino. Como quien tiene una lipotimia.
Andrés siguió camino para casa para buscar los papeles carnets y etcéteras; yo me bajé como un tiro en el sanatorio. Mi cara lo diría todo por que el guardia de seguridad me dijo "pase derecho por acá señora". Al llegar, tartamudeando le digo a la recepcionista que era una emergencia, que no tenía los papeles y que la gorda se había comido un remedio, Cata por su parte se recostó sobre el mostrador y levantó la cabecita para repetir "comí e remeio de abuelo". Enseguida nos mandaron a un consultorio, me hicieron las preguntas pertinentes y la doctora me explicò que seguramente sólo la había chupado, que como había sido hace menos de una hora le ibamos a dar una noseque carbonatada que inhibía los químicos y que veríamos como evolucionaba... me volvió el alma al cuerpo. Los primeros tragos se los dí como si su boca fuera un embudo, luego en un ataque creativo me puse a jugar con ella en la silla giratoria, el juego consistía en que a cada trago de la substancia negra e correspondía una vuelta en silla. Ella se empezó a animar y a gritar "fubito de jalowìn" (finalmente de algo sirvió tanto machaque del disney channel, machaque que intenté combatir en vano ya que todavía la gorda lo recuerda) Y después de cada trago decía "buuu soy el montuo".
La puesta en escena al mejor estilo "la vida es bella" nos sirvió a las dos, a mi para reírme, a ella para tomar el brebaje. Me hizo pensar que la risa me da seguridad, no solo me tranquilizaban sus carcajadas de nena sana sino que reírme me llenaba de aire.
Llegó el papá, ya no estaba totalmente a cargo, se sucedieron los controles. Cata estaba mas inquieta y tanto la doctora como nosotros mas tranquilos a la verla tan activa... pasadas 3 horas tenìamos el alta.
Y volvimos a casa, Andre me compró comidita rica y a dormir, porque "no pasó nada"... pasada la adrenalina del momento empecé a sentir el cansancio, como los coletazos del susto, se ve que la risa sirvió ese rato pero ahora se me anudó en la garganta... la espío en la cuna de a poco voy entendiendo que ya está, que fue "sólo" un susto y que de estos vendrán unos cuantos y como pudimos con este, podremos con todos nianque vengan degollando.

No hay comentarios: